CAPITULO 45
Lali:
¡Sos rico!- exclamó, con un nudo en la garganta.
Peter:
¿Lloras porque soy rico?- preguntó, incrédulo.
Aunque
tratara de explicárselo, Lali sabía que él nunca lo entendería. Peter siempre estaba
seguro de hacerlo todo bien, jamás se le ocurría dudar de que pudiera lograr
alguna cosa. No sabía lo que era ser inútil. Ahora esperaba que ella manejara
la casa, las dependencias, los sirvientes y ya que estaba, que ofreciera una
fiesta para unos doscientos amigos.
Peter:
No puedo ayudarte si no me dices lo que te ocurre- insistió Peter mientras le entregaba
un pañuelo- No podes enfadarte porque no soy un granjero pobre.
Lali:
¿Cómo...?- sollozó- ¿Cómo puedo...? ¡Ni siquiera he visto un telar en toda mi
vida!- Peter tardó un momento en entender a qué se refería.
Peter:
No tendrás que tejer vos, sólo ordenar a otro que lo haga. Las mujeres te
traerán sus problemas y tú los resolverás, es muy sencillo.
¡Nunca
se lo haría entender! Lali se levantó de un salto y echo a correr otra vez.
Volvió por el pasillo, pasó por el salón de baile y de allí a otro corredor,
hasta que al fin encontró su dormitorio y se echó sobre la cama con un
revoloteo de faldas de muselina y enaguas.
A
pesar de sus sollozos oyó los pasos lentos de Peter que se acercaba. Se detuvo
en la puerta, la observó un momento y decidió que ella necesitaba estar sola.
Al oírlo marcharse, Lali se echó a llorar con más fuerza.
Horas
más tarde, una criada llamó suavemente a la puerta y le preguntó qué deseaba
cenar. Lali estuvo a punto de responder pero luego comprendió que ni siquiera
sabía qué comidas había en América.
Finalmente,
dijo a la muchacha que no tenía apetito y le pidió que se marchara, tal vez
pudiera quedarse en esa habitación para siempre, sin tener que enfrentarse al mundo
exterior.
A
pesar de la primera impresión de Lali acerca de lo difícil que era dirigir una
plantación, distaba mucho de la realidad. Peter se levantó antes del amanecer y
en pocos minutos, había mujeres en la habitación que comenzaron a hacer
preguntas a Peter. Al ver que ella no tenía idea de las respuestas, comenzaron
a mirarse de soslayo. En un momento, una de las criadas murmuró algo acerca de
cómo un hombre como Peter había podido casarse con alguien como ella.
Y por
todas partes oía el nombre de Belén. Una tejedora le mostró diseños que le
había dado Belén. Un jardinero plantaba bulbos de la señorita Belén. En el
cuarto azul halló vestidos que pertenecían a la señorita Belén, que a menudo se
hospedaba allí.
Durante
la cena, le preguntó a Peter por esa mujer pero él se limitó a encogerse de
hombros y explicó que era una vecina. Después de tanto tiempo lejos de su
plantación, estaba atiborrado de trabajo. Aun durante las comidas revisaba
papeles con sus dos ayudantes, cifras de bienes recibidos y bienes expendidos.
Lali no quería agotarlo más habiéndole de sus problemas.
Un
día, el mundo de Lali se detuvo en seco. Peter había regresado para cenar de
prisa y le hablaba con
la
boca llena acerca de la llegada de un nuevo barco desde Inglaterra. En ese
momento lo sobresalió el sonido de los cascos de un caballo en el camino de
ladrillos. Se oyó el chasquido de un látigo seguido por un agudo relincho y
Peter se dirigió a la ventana, de prisa.
Peter:
¡Belén!- gruñó- Si vuelves a golpear a ese caballo, te daré a ti con ese
látigo- una risa profunda y seductora pareció llenar el corredor.
Belén:
Mejores hombres que vos lo han intentado, mi amor- respondió una voz femenina y
luego se oyó otro chasquido y otro relincho.
La
casa entera tembló cuando Peter bajó la escalera. Lali, dejó la servilleta
sobre la mesa y se dirigió a la ventana. Abajo había una morocha bellísima que llevaba
un traje de montar verde esmeralda sobre su atractiva figura. Su cintura
pequeña y sus caderas redondeadas hicieron que Lali mirara sus propias curvas pero
en un instante volvió a mirar a la mujer que montaba a su semental negro que corcoveaba,
furioso, en el patio. La mujer parecía controlar con facilidad a aquel inmenso animal.
Miraba hacia el frente de la casa y al ver aparecer a Peter, volvió a reír y
levantó el látigo.
En pocos
segundos Peter dio un salto y le arrebató el látigo levantado pero la mujer
clavó sus talones al caballo y lo hizo retroceder. En ningún momento perdió el
equilibrio ni la confianza cuando el animal levantó las patas delanteras y
cuando volvió a bajarlas ella amenazó volver a clavarle los talones pero Peter
fue más rápido que ella. La tomó del brazo con una mano y, con la otra, las riendas.
Por un momento forcejearon, la risa de la mujer llenaba el aire, como si fuera
la luz de la luna en pleno día.
Era
una mujer alta y fuerte, y con la fuerza del caballo era un excelente rival
para Peter. Cuando al fin Peter logró que ella se apeara, lo hizo abrazándose a
él y rozando con sus pechos la cara y el pecho de Peter. Luego abrió la boca y
lo besó de modo tal que desde la posición de Lali, parecía querer devorarlo.
CONTINUARÁ…
@iamlaliter
sera..... aaaaaaaggg!!! FUERA BELEN!! sube otro mas porfaa!! besos
ResponderEliminarfaty*** (@fanovelitas_arg)
maas nove : ))
ResponderEliminarmas noveeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee
ResponderEliminarooo no creo que a lali le paresca muy bien esa imagen y conociendo a peter no el va importar y a lali le va aprecer el fin edl mundo
ResponderEliminaraaaaaaaaaaaaaaah! no nos puedes hacer estoooooooooooooo!
ResponderEliminarpobre lali! :C
ResponderEliminarestube todo el dia esperando el capitulo! sube otro porfis! un regalito a las que leemos siempreee!
ResponderEliminarRecien pude leer los caps, ya me imaginaba q belen venia a traer discordia entre pitt y lali!
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